Hoy vamos a conocer un poco más al cortador Mario Parrado de Mucientes (Valladolid).

¿Como te definirías dentro y fuera de la plaza?

-Tanto dentro como fuera de la plaza me considero una persona sencilla, sincera, amigo de mis amigos y humilde. Pero cuando estoy frente al toro mis sensaciones cambian, la adrenalina se apodera de mi cuerpo y a la vez que siento miedo disfruto. El mundo del toro es mi gran pasión, con sus pros y sus contras.

La temporada pasada fue una de las mejores para ti desde que empezaste en este caso, participando en 18 concursos de los cuales pasaste a la final en 8 y ganando 2. ¿cómo la viviste?

-Sinceramente ha sido una de mis mejores temporadas, muy especial para mí porque he podido disfrutar de cada momento y mis esfuerzos se han visto recompensados con bastantes finales.

¿Con que concurso te quedas de la temporada y por qué?

No podría quedarme con uno solo porque cada uno me ha aportado algo diferente. Pero si tuviera que escoger me quedaría con dos: La noche de laguna de Duero, en el pucelano de oro, y Mozoncillo. El primero, porque aquella noche fue muy especial, pude sentir el apoyo del público y pese a la cogida, que quedó en un susto, lo disfruté mucho quedando segundo clasificado y Mozoncillo porque pude disfrutar en la final de un gran novillo de Montealto. Supe lidiarlo como a mí me gusta, a mi parecer, pegué dos cortes de los de verdad, dando la ventaja al animal y quintándomelo a golpe de riñón.

Llevamos años con unos cortadores a gran nivel tanto de los que empiezan como de los que ya están consolidados,

¿A quiénes ves mejor?

Si que es verdad que hoy en día hay muchos cortadores con mucho talento. No puedo decantarme por uno solo dado que cada uno tiene su propio estilo y dentro de él lo hace de la mejor manera posible.

Te voy a pedir que te mojes…. Dime 1 o 2 dos compañeros que te gusten de cada suerte corte, quiebro y salto.

Bien, siendo sinceros los cortadores que más me gustan son: Dany Alonso y Zorrillo, quebradores: Chuvas y Poca y saltadores: Pakito Murillo y Cristian Peñas.

¿Como llevan tu familia y tu pareja que estés dentro de este mundillo?

Por norma general, lo llevan mal. Mi madre nunca ha sido capaz de ir a verme, mi hermana empezó estando conmigo, pero al ver mi primera cogida la superaron los nervios y no volvió, simplemente esperan una llamada al final del concurso. Sin embargo, mi padre me acompaña allá donde vaya y para mí es de agradecer porque el también disfruta.

Por otro lado, está mi pareja la cual acude conmigo siempre que puede, a pesar de los nervios se mantiene firme y critica conmigo. Pero lo más importante y lo que más valoro es que siempre está ahí.

Sin olvidarme de todos esos amigos, que no hace falta nombrar, que ya son una familia para mí. He de agradecer su apoyo y cariño. Dando gracias al mundo del toro que los ha puesto en mi camino.

Sabemos que no es fácil dedicarse a esto, ¿qué es lo mejor y peor que te has encontrado?

Sinceramente, como bien has dicho este mundo te aporta cosas buenas y malas. Entre las buenas están todas esas personas que vas conociendo en todos los lugares a los que vas a concursar. Y entre las malas, las cuales me afectan psicológicamente, son las cogidas de mis compañeros. Este año lo he pasado realmente mal con las cogidas de dos grandes amigos: Chuvas en Medina del Campo y Juanito en Iscar, el cual iba a estar esa misma tarde en el callejón conmigo apoyándome tras mi cogida de Laguna de Duero. También son malas las decepciones que te llevas cuando depositas tu confianza en compañeros que empiezan a triunfar y se olvidan de todo lo que has llegado a hacer por ellos, incluso en algunos casos hasta dejándote de hablar.

O dicho de otra manera ¿con que te quedas y que cambiarías?

Quedarme me quedo con las amistades y momentos disfrutados. Sin embargo, aspectos que cambiar sería el tema de los jurados, es decir, poner a gente que supiera lo que significa estar en el ruedo y no guiarse por las críticas de los demás.

Eres un cortador puro pero ¿has pensado alguna vez en probar otra suerte?

Exacto, mi punto fuerte es el corte puro, pero no descarto en un futuro, como ya he practicado en los entrenamientos, hacer quiebros.

Estamos viviendo en todo el país una situación mala debido a la crisis del COVID-19 y el sector taurino se está viendo muy afectado, festejos cancelados, toros al matadero, etc.. ¿Como lo estás viviendo y cómo crees que evolucionará la temporada?

Estos momentos que estamos viviendo son, en general, muy duros para todos. Si es verdad que al campo bravo le está afectando de una manera considerable debido a que mucho ganado tiene que ir al matadero directamente. A pesar de que hay muchos festejos cancelados no dejo de ser positivo pensando que en agosto podremos disfrutar de ello.

Esta cuarentena se está haciendo pesada, soy una persona inquieta que apenas pisa por casa, y estar encerrado en un piso cuesta. Sin embargo, estoy apreciando un montón de cosas que antes se me pasaban por alto. Solo deseo que esto acabe pronto y que podamos disfrutar de todo aquello que nos gusta, sobre todo del mundo del toro.

¿Como te preparas para un concurso?

A lo largo de todo el año, procuro estar en contacto con el animal por eso mis entrenamientos se basan en hacer capeas junto con mis amigos y mi pareja. Es una forma de ponerme en situación y gracias a todos los consejos que me dan las personas de mi día a día mejoro. También me gusta ver las fotos y vídeos de las temporadas pasadas y así apreciar los fallos.

¿Qué costumbres tienes?

La verdad, soy una persona un poco maniática. Cuando tengo concurso, antes de salir de casa tengo que dar un beso a mi madre, santiguarme y besar las pulseras tanto de mi abuela, como de mi novia. Una vez en la plaza, siempre salgo besando las pulseras, con la mano derecha toco las tablas y con el pie derecho la arena. También tengo la manía de no poner los ojos en el toro hasta que no se cierre la puerta del toril. A pesar de eso, luego me encanta observar al animal, ver cómo se comporta, como corre, si llega a tablas, etc…

¿Qué te gustaría llegar a conseguir en este sector?

Siendo sinceros, me encantaría llegar a la final de la liga del corte puro, es decir, pisar la plaza de Valladolid. Es uno de mis grandes sueños, sin olvidarme de Cigales, ese pequeño pueblo que me ha visto crecer, donde me gustaría lograr ser campeón.

Normalmente todos tenéis una plaza predilecta, ¿Cuál es la tuya?

Las plazas que para mí son importantes son: Mayorga, Cigales, Laguna de Duero y Medina del Campo, donde tengo una espinosa clavada que espero conseguir. Pero como bien decía antes, espero lograr el sueño de pisar Valladolid.

Vaya me sorprende que no hayas mencionado ninguna plaza grande como Madrid o Zaragoza, ¿no te gustaría llegar a la final del campeonato de España por ejemplo?

Obviamente pisar esas plazas son sueños que cualquier persona que se dedique al mundo del toro quiere cumplir. Pero soy una persona paciente y me gusta pisar con pies de plomo por lo que sueño a corto plazo y el futuro ya se decidirá.

En la fase del pucelano de oro celebrada en Laguna de Duero, tuviste un grupo complicado y te marcaste muy buenos cortes con revolcón incluido, llegaste a la final y quedaste segundo ¿cómo recuerdas ese concurso?

A pesar del revolcón, fue uno de mis mejores días con ese bonito novillo de la Campana. Estuve a un buen nivel y lo más importante fue sentirme arropado por el público, gesto que no se me olvidará.

En Mozoncillo y en Simancas ganaste, fueron dos concursos totalmente diferentes con toros complicados, supongo que da mucha satisfacción conseguir esos resultados, ¿que significaron esas dos tardes para ti?

Fueron concursos difíciles, pero con una gran satisfacción debido a que supe entender a los animales y darles lo que pedían en ese momento, que para mí eso ya es un triunfo. La cosa más bonita con la que me quedo es la gran ovación del público, gestos que se quedan grabados para siempre.

¿Cuándo fue tu primer concurso y qué sensaciones tuviste?

Mi primer concurso de novillos fue en el año 2013 con la empresa talento castellano. Era la celebración de uno de sus aniversarios con novillos de Manuel Gimeno, creo recordar. En ese momento, había cortado muchas vacas, pero novillos sin embargo muy pocos, como se suele decir, estaba poco rodado. A pesar de que me fui con un sabor amargo, ese fue uno de los motivos a seguir adelante y llegar al punto en el que hoy en día me encuentro.

Sé que es sacrificado este mundo y que no siempre es justo, pero cuéntanos como fue el primer concurso que ganaste.

El primer concurso que gané con toros fue en el año 2017 en Mayorga, un pueblo al que tengo especial cariño. Varios factores son los que me hacen sentir esto: las grandes amistades que tengo allí y la experiencia de haber ganado mi primer concurso. Ahora bien, respecto al concurso, fue una tarde complicada con los novillos de Ortiz de Urbina. Pase muchos nervios, como de costumbre, pero me hizo mucha ilusión ganar. La celebración fue al instante yendo a tomar unos chismes al bar, tanto con los compañeros como las grandes amistades que residen allí.

Sabes que siempre se habla de lo que cobráis, las condiciones que tenéis en las plazas, el no estar asegurados en los concursos ¿qué opinas, os sentís valorados en ese sentido?

A mi parecer, estamos muy poco valorados. Creo que debería haber más igualdad y mantenerse más unidos en estos temas y así poder asegurar las condiciones.

¿crees que se les está dando oportunidades a gente «poco conocidas» para demostrar si valen o las empresas van más a lo seguro?

En mi opinión, hay algunas que empresas que si dan oportunidad a todas esos jóvenes con ganas de demostrar lo que saben y valen, pero en algunas otras, hay una verdad muy distinta y es que parece que tienes que tener “padrino” para poder entrar en ellas. Creo que hay muchas personas que valdría la pena probar y dar una oportunidad.

Y para finalizar, dar las gracias a Pasión Taurina por hacerme esta entrevista y en especial a Cristina Hernández que gracias a ella he pasado estos días de cuarentena un poco más amenos.

Un saludo, Mario Parrado.